Podrán ser curvas casi rectas.
Podrán ser curvas suaves.
Podrán ser irregulares, con pendientes incluidas.
Podrán ser curvas peligrosas, explosivas.
Podrán ser curvas muy profundas.
Pero siempre serán curvas y debes estar orgullosa de ellas.
Sácate partido: arréglate, ponte guapa, maquillate, vístete seductora y elegante.
Mírate al espejo y dime ¿qué ves?.
Eres una mujer hermosa, con una piel de seda que hipnotiza hasta al más casto e inocente de los hombres.
Quizá tu no lo veas, pero con tus curvas te llevas de calle a cualquiera que se atreva a mirarte.
No debes avergonzarte jamás de tu hermoso cuerpo, pues tu Señor lo amará y cuidará como su Templo.
Sonríe, guiñate un ojo cada mañana y disfruta de tu feminidad.
¡No te escondas!
Apuntes para ser una gran Sumisa
1.
Protocolo:
·
No
mirar a la cara sin permiso.
·
No
tocar sin permiso.
·
No
hablar sin permiso.
·
Si
me encuentro sentada, mantener las piernas ligeramente abiertas.
·
La
boca nunca se debe cerrar.
·
Sólo
debo tratar de Mi Señor o Mi Amo al mío propio, a los Doms/ Amos/ Tutores se
debe tratar siempre de Señor/a y a los sumisos hasta que concedan el permiso de
tutearles, también se les debe tratar de Usted.
·
Sólo
debo obediencia a mi propio Amo, o en caso de tener tutor y este exigir que sea
así, para un buen aprendizaje.
·
Mantenerme
siempre a la derecha de Mi Señor, por debajo de su posición (bien sea sentada o
arrodillada…) y si le tengo que pedir algo, situarme de frente, con la cabeza
agachada y sentada o arrodillada.
·
En
un reunión de Dominantes/ Amos/ Tutores, mantenerme callada y sólo hablar cuando se
de el permiso y en su caso, siempre hacerlo con respeto y humildad.
·
En
caso de participar en una conversación, repetir tantas veces como sea necesario
el tratamiento a la persona, sea Señor/a o de Usted.
·
En
caso de no respetar ninguna regla o norma, al propio Amo o Tutor, se les podría
exigir que aplicasen un castigo al sumiso/a, el cual podría llegar a ser
severo, siempre respetando los limites infranqueables.
2.
Cómo debo presentarme
ante mi Amo:
·
No
debo llevar puesta cualquier ropa, si no dispongo de ropa adecuada, basta con
usar una ropa que no se use en absoluto y adaptarla para la sesión.
3.
Comportamiento ante mi
Amo:
·
Cuando
tenga el permiso para hablar, debo hacerlo siempre a media voz (ni muy bajo
como para no oírse, ni demasiado fuerte como para que se entienda como falta de
respeto).
·
Si
hablo con él a través de medios escritos, debo referirme a él siempre con Mi
Señor y las iniciales en mayúsculas.
·
Nunca
debo “aliviarme” sin permiso de mi Amo.
·
En
caso de estar sesionando, siempre debo mirar a la cara y no ocultar el rostro y
en el momento de llegar al clímax, siempre pedir permiso para dejarme “ir”.
·
Agradecer
siempre cada acto de mi Amo hacia mi, también después de que él me de el
permiso y yo me deje “ir”, darle siempre las gracias.
Atada a Usted, me siento libre.
Postrada a sus pies, soy feliz.
Junto a Usted, cada vez me siento más yo, pero sé que sin Usted también todo acabaría en cuestión de décimas de segundo.
Mi Señor, poquito a poco recorremos el camino, vamos despacio sí, pero asegurando cada paso y siempre decididos a avanzar cada día más, siempre con nuestras manos enlazadas.
Sabemos que aún nos queda una vida entera por aprender y experimentar, por ser conscientes realmente de toda la magia que nos rodea; sabemos también que ningún camino fue asfaltado con pétalos de rosas, sino que también fue hecho con sus espinas, pero sé que a su lado jamás me rendiré, porque está conmigo, me cuida, me protege, me hace sentir viva.
Precisamente por todo ello, me gustaría dedicarle este post, porque sí, porque me da la gana, porque Usted se lo merece por ser tan grande, tan especial, tan tierno y perverso a la vez, por ser tan ardiente, por enseñarme tantas cosas diariamente, por su apoyo, por regalarme cada una de sus sonrisas por cada reto que cumplo, o simplemente por verme esforzándome en ser mejor cada día sólo por Usted, por ser mi motivación.
Cedido por una gran amiga que hice recientemente.
Comunicaré con completa honradez mis necesidades, deseos, límites y experiencias. Comprendo que al no hacerlo no solamente evitaré que Mi Dominante y yo tengamos la mejor experiencia posible sino que también pueda conducir a daño físico y emocional.
No intentaré manipular a Mi Dominante. No empujaré para hacer una sesión como yo necesite o desee, no mandaré desde abajo.
Guardaré una mente abierta con asuntos de los cuales no me encuentre cómoda e intentaré ampliar mis metas y reducir mis limites e incluso superarlos. Continuaré creciendo como sumisa y como persona.
Aceptaré la responsabilidad de descubrir que satisface a Mi Dominante y me esforzaré en cumplir sus gustos y deseos.
No permitiré que me dañen o ser abusada. Se que ser sumis@ no es igual a ser un felpudo.
Seré cortés y siempre ayudaré a mis compañer@s sumis@s, compartiendo sensaciones, y experiencias con la esperanza de que aprendan y se beneficien de mi experiencia. Ayudaré a l@s principiantes para que elijan el camino correcto.
Seré receptiv@ a mi Dominante. No intentaré ocultar lo que sé, piense o sienta, de modo que pueda asistirle en sus responsabilidades como mi autoridad. Sé que los Dominantes no son adivinos y no esperaré que Mi Dominante sepa mis pensamientos o mis sensaciones, sino que se lo haré saber siempre.
Asumiré mi parte de responsabilidad de una sesión o de una relación dañada.No pondré la culpa total en Mi Dominante. Comprendo que las cosas no pueden resolverse ocasionalmente como debe y pondré mi mejor esfuerzo para dejarlo atrás y seguir hacia delante apostando por la relación.
Daré el regalo de mi sumisión solamente a quien pueda valorarlo y desee responsablemente recibirlo.
Seré obediente a Mi Amo aún incluso cuando discrepe con lo que me pida. Acepto que tiene mis mejores intereses en su corazón y que sabe a menudo mejor que yo qué necesito en una situación determinada.
Sé que mis acciones reflejan en Mi Dominante, y haré para que los demás me vean de forma positiva. No avergonzaré ni enfadaré intencionadamente a Mi Dominante.
Sobretodo llevaré mi título de sumisa con honor. Nunca haré que otros piensen que ser sumisa significa ser débil, inhumana o prostituta. Sentiré orgullo en quién y qué soy y nunca me mostraré de forma negativa.
En el post que escribí como castigo impuesto por Él, como resultado del último día fatídico que tuve y en el que publiqué antes de irme a reflexionar durante mis días de playa, mis mayores miedos son la absoluta oscuridad estando sola en el lugar en el que me halle, la basta y vacía soledad y por encima de todo, que Él me abandone por no conseguir en algún momento, ser merecedora de todo su orgullo.
Pues bien, para que el último punto no suceda jamás, creo saber qué pasos he de dar, porque Él me ha sabido guiar hasta donde me encuentro hoy, mas para mi mayor consuelo, Él me prometió que jamás me dejaría.
Para conseguir superar el primer punto descrito, Él me pidió que fuera bajando la persiana día a día, poco a poco, relajándome en la cama.
Lo comencé a realizar desde mi regreso a casa hasta ahora y como se puede ver en las fotos, he pasado de dormir prácticamente con la persiana completamente subida, a poder hacerlo casi a oscuras.
Es un gran resultado, ¿verdad?.
.................
Sentía la necesidad de compartir con todos vosotros, otra satisfacción adquirida.
Terminado el tiempo de descanso, vuelvo de nuevo con fuerzas renovadas, con nuevas ilusiones y esperanzas, con nuevos deseos y sueños.
Terminó mi tiempo de reflexión y ahora si que sí, me siento decidida y segura de querer adentrarme en este camino, sé que no será fácil recorrerlo, pero en esta vida ¿qué lo es?.
Como ya dije en los anteriores posts, estoy muy agradecida de haber descubierto este nuevo mundo, porque me ha permitido descifrar poco a poco cosas que jamás me hubiera parado a pensar y mucho menos corregirlas, al tiempo que también me ha permitido descubrir otras facetas de las que nunca me pensé capaz, así día a día me sorprendo.
Día a día aprendo que hay cosas que deben ser a su debido tiempo, no debo ansiarme, ni ponerme frenética, siempre es bueno ser calmada y tranquila, todo se consigue así mucho mejor.
Y todo esto es bueno para mí, porque sé en el fondo de mi alma que al fin, encontré mi identidad.
Como una niña que descubre los colores, las luces y todo lo que es nuevo alrededor para ella, así lo observo, con esa mirada de inmensa curiosidad e ilusión.
Como la mujer que empieza a sentir y ser poco a poco más consciente, como sumisa que nace y empieza a crecer, así me siento y crezco.
Ya no me dan miedo los obstáculos que puedan surgir en este viaje hacia el encuentro con Él, no me harán retroceder, si acaso buscar otro sendero secreto por el que poder vencerlos.
Mi cuerpo bañado en fina blanca arena y en mar, con sabor salado en mi piel, sueña con encontrarse con esa persona que lo está esperando en algún lugar, para que lo cuide, lo mime, lo ame y lo coloreé si le place.
Mi alma llena de luz y de calma, espera que la acoja en sus manos para guiarla, ayudándola a crecer, observando cómo madura, para poder al fin unirse a Él, de la manera en que ningún mortal hubiera soñado jamás.
Una semana de descanso y reflexión profunda.
Sé que mi vida y mi lugar es a su lado.
Toda mi persona tanto física como mental y mi alma, son suyas.
El aire que respiro, es el que usted expira de sus pulmones.
Mi corazón y mis latidos, son los suyos.
El calor de mi piel, es el fuego que recorre sus venas.
El aroma de mi ser, es su olor profundo a deseo.
Sus labios son los que calman mi sed.
¿Puede observarlo? estoy hecha de retazos de usted y llevo marcado muy hondo su nombre, su marca de propiedad, su collar, su penetrante mirada que atraviesa mi alma, persiguiendome a cada segundo, vigilando cada uno de mis actos.
Soy su fiel niña, mujer, sumisa y perra, la que cada día y cada noche, a cada instante, siempre está a la espera de que usted le brinde un poquito de atención y cuidados, sólo un poquito de mimos, o un ratito de juegos en el que poder divertirnos los dos.
Sé que hace poco comencé a recorrer este sendero misterioso que me llevará donde usted esté, pero empiezo a sentir como si hubiese aprendido ya muchas cosas, aunque también admito que esto es sólo el principio.
Creo firmemente en que, para poder avanzar y ser realmente consciente de todo el camino avanzado, de las cosas conseguidas y las metas que faltan aún por alcanzar, se debe hacer obligatoriamente de vez en cuando un descanso, para pararse a respirar y reflexionar; pero esto no significa que me detenga y abandone, no, sólo así seré capaz de tomar fuerzas para seguir sin rendirme.
En una semana, volveré con fuerzas renovadas, quizás un poquito asalvajada, pero seguro que usted sabrá redirigirme por el camino correcto Emoticono wink.
Hasta entonces, amigo, amado y deseado, amo, tómese un respiro y reflexione usted también o aproveche para planear nuevas enseñanzas, nuevas aventuras y nuevos juegos con los que sorprenderme a mi regreso.
Le amo, le deseo, le necesito y le respeto.
Es para mí, todo un orgullo saber que sólo con usted vivo, sin usted muero, soy sólo suya y sin usted de nadie más.
Es para mí toda una satisfacción, saber que si me esfuerzo en todo lo que usted me ordene y en ser buena, seré merecedora de su cariño, de sus cuidados, del alimento y el agua que me ofrece cada dia, del orgullo que puede sentir al poder lucirme a su lado.
No tenga ninguna duda, de que siempre sere suya, jamás me apartaré de su lado.
Usted es mi Señor, mi Dueño y mi Amo.
Maldita tormenta...
Estaba claro que no iba a traer nada bueno.
Como un monstruo gigantesco y furioso, rugió con rabia, devastándolo todo a su paso, abofeteando el viento, haciendo temblar el suelo bajo mis pies y con ello, alterando el ritmo de los latidos de mi corazón, paralizando mis pulmones.
Provocó en mí la voluntad de quererme hacer diminuta y esconderme bajo tierra para intentar escapar, con la sensación del ahogo por el llanto en mi garganta.
Sacó a relucir mis más internos temores, creó en mí un remolino de sentimientos y pensamientos contradictorios.
Me sentí sin escapatoria y acabé aplastada de un sólo zarpazo contra el suelo.
Aquello derivó en que por la noche se escapara de mi ser, la fiera que llevo dentro, en busca de algún consuelo, de fortaleza que no sentía.
Explotaron en mí miedos que ya creí vencidos y curados, me rendí ante la ceguera de aquellos viejos sentimientos y sin darme cuenta, retrocedí un poco en el camino ya avanzado.
Por culpa de esta sensación, de estos miedos, de estos sentimientos y pensamientos, herí en lo más profundo a quien menos quería, a quien menos deseaba dañar, a quien menos se lo merecía.
Entonces yo solita retrocedí otro paso más, ante la visión de tal error, por el miedo a lo que vendría después.
El enfado de él, su decepción, su rabia bastaron a modo de bofetada, para hacerme pensar en lo ocurrido, abrir los ojos y darme cuenta que todo lo había provocado yo y que únicamente yo tenía en mis manos la solución al problema.
Mas si me mostré profundamente arrepentida, no fue suficiente para que él me permitiera buscar un mínimo consuelo en sus caricias ni en sus labios.
¿Quería saber cuáles podrían ser mis mayores miedos?, bien, aprovecharé el momento para mostrárselos.
Me dan verdadero pánico las tormentas como la de ayer y como la de hoy, me dan pánico la oscuridad completa y la vasta y vacía soledad, pero sobre todo lo que más miedo me da, es si por algún motivo como el de ayer o parecido, o si se cansa de mí, me abandone; llegados a este punto no lo soportaría.
Y si por alguna razón, en algún momento dejo escapar mi genio y mis celos, es porque no puedo permitirme el lujo de que me deje.
Soy SUYA, total, absoluta, completa y exclusivamente.
Y duelen estas palabras y esta declaración pública, porque aunque usted todo esto ya lo sabía, yo nunca lo había plasmado en palabras, ni había reflexionado verdaderamente sobre mi gran problema.
Mas esto sólo ha sido un obstáculo en mi camino, algo que me ha servido para pararme a pensar, aprender a que antes de abrir mi boquita, debo respirar lentamente, contar hasta diez y calmarme, antes de que pueda cometer un error aún mayor y también me ha servido para aprender a vivir con más calma.
Porque lo único que tengo claro, es que seguiré este camino tan misterioso y lleno de dificultades hasta poder llegar donde usted esté, cueste lo que cueste, pase lo que pase.
Sólo tengo vida junto a usted y si usted me la da.
Perra
Siempre a sus pies, siempre fiel a Él.
Siempre esperando paciente para recibirle, siempre obediente en lo que crea conveniente, siempre dispuesta para el juego que Él proponga, siempre deseando aprender algo nuevo.
Mi único objetivo: hacerle y tenerle siempre feliz.
Gata
Siempre al acecho, siempre ansiosa, siempre mimosa.
Siempre pendiente de su provocación, siempre deseándole.
Siempre dispuesta a huir de usted, cada vez que se le caliente la mano.
Mi único deseo: siempre complacerle.
Áteme, juegue conmigo, provóqueme.
Haga arder mi piel, mi cuerpo y mis ganas.
Haga suyos mis sueños y deseos y permítame vivir en los suyos.
Márqueme en lo más profundo de mi alma y marque mi ser.
Soy SUYA.
Hágame chillar, gemir, aullar.
Hágame maullar y ronronear.
Hágame temblar ante su presencia, con tan sólo sentir su mirada, un mínimo roce de su tacto o leve murmullo de su voz.
Guíeme en la oscuridad de la noche y a plena luz del día.
Aquí me tiene, sírvase de mí para lo que le plazca, usted es mi Dueño.
Sus ojos marrones, su mirada sincera e intensa.
Su cara de hombre, su boca ardiente.
Su piel tostada, dulce y salada...
Usted desde el minuto cero hizo que sin darme cuenta, me rindiera a usted.
Con gestos realizados con disimulo, se ganó mi mente y mi corazón, hipnotizó mi alma.
Como una pantera que acecha a su presa, hizo que me sentiera suya, sabiendo que si daba un paso en falso, me escaparía veloz de sus manos.
Con su manera de proceder, consiguió que no le tuviera miedo.
Soy su aprendiz de brujería, usted me hechizó.
Sentí cómo me amarraba fuerte a usted, con sus brazos y sus manos.
Su cuerpo irradiando ese calor que huele a deseo, pidiéndome que me dejara llevar.
Sus ojos observándome, midiendo y calculando cada acción y reacción.
Sentí sus labios hambrientos, recorriendome desde mis labios casi inocentes, hasta mi cuello.
Observé y sentí, cómo me hacía sentir su deseo.
Cómo me desnudaba para usted, dejando mi cuerpo expectante y vulnerable.
Sentí sus manos provocándome, recorriendo cada milímetro de mi piel, sus labios torturándome con pequeños besos, dejando un reguero de su aliento, a medida que se deslizaba hacia donde mi cuerpo pierde su nombre.
Sentí sus manos abriéndose paso entre mis piernas, hundiéndo su cara entre ellas.
Me lanzó hasta donde las nubes son de algodón y comienzan a crear formas extrañas.
Cuando me tuvo hechizada, dejó escapar a la fiera que llevo dentro, dejándola recrearse en el suave tacto de su piel, recorriéndole por completo.
De nuevo le sentí sobre mí, mimando mi piel, abrazando mi cuerpo, preparándolo para la acción.
Abriendo mis piernas como la anterior vez, fue acariciándolas, mimándolas, hasta que se hundió de nuevo completamente en mí, llenándome de usted, torturándome, sintiendo ese dulce dolor de tenerle dentro.
Me bajó al infierno, para después catapultarme directa al cielo.
Éxtasis, eso fue lo que siento siendo suya y ese deseo irrefrenable de quererle complacer una y otra vez.