Simplemente entender que la sumisión tiene dos caras: No hay D sin s, ni si sin D. Así que cada Dom tiene su imagen, su deseo, si bien hay un denominador común en lo que llamamos BDSM, sino ya no es BDSM, es otra cosa respetable, pero no BDSM
No se si estas cualidades son compartidas, pero son las que aprecio: belleza, no por el físico sino por el alma, cuerpos perfectos no por su esbeltez de canon de modelo, sino por que hasta sus imperfeciones son bellas, sensuales. Una sumisa ha de saber abrirse de piernas, gozar y ahcer gozar. Pero no solo abriendose de piernas, sino con cualquier placer sibarita. Debe ofrecer su humedad con solo una palabra de su Señor. Debe soportar cada vicio de su Señor, pero tambien hacerle desear nuevos caminos y que el Señor desee completar los que su alma atisba. Los golpes, las cuerdas, los juguetes, los castigos y los premios son solo un intrumento para que la sumisa desee camianr cada dia más, en un camino que es de dos.
Pero no solo placeres. Hay zorras, respetables y perras. Zorras caprichosas, impacientes. Ninguna censura en mis palabras hacia ellas, es su naturaleza, salvaje. Hay zorras que podrian hacer feliz a muchos Dominantes y no digamos hombres y mujeres.
Pero en mi gusto, una buena sumisa es una perra. La perra se acricia y disciplina. La perra obedece y ayuda, la perra sugiere, acompaña. Y la perra es paciente.
Hoy todo va de deprisa, es inmediato. Todo este rollo que has tenido a bien leer hasta aquí es por dos cosas. LA primera, que considero la paciencia una gran virtud. hay veces en la vida que por circunstancias no puedes hacer lo que desearias. Hay veces que necesitas apoyo, y el apoyo es solo un "estoy ahi". La perra se tumba y espera la caricia. Sabe que vendrá.
Una sumisa a la que admiro me contó que su actual Señor le tuvo esperando sin darle respuesta durante meses. El objetivo de El era probar su determinación y paciencia. Que tonto! pensaran algunos, pudo haberla perdido y la joyita tenia varios pretendientes. Que sabio! pienso yo
La segunda cosa y más importante es que no conozco actualmente mejor sumisa que thaïs, quien me ha otorgado el honor de guiarla como MEntor durante estos últimos meses
Y quiero hacerlo público, entre mis amistades de este gran palacio