Abro la ducha para que salga el agua mientras me desnudo lentamente, es justo lo que necesito. Dejo la ropa tirada por el suelo,un reflejo claro de mis sentimientos, esparcidos y sin conexión. Por fin me aventuro a meterme bajo la fina lluvia de agua caliente, dejándome caer contra la pared de azulejos que tengo justo a mi espalda. Están helados, pero no me importa, esa sensación contrasta con el calor abrasador y hace que me sienta un poco mejor.
Siento como el agua besa mis párpados cerrados para seguir hacia abajo, dibujando mis labios firmemente cerrados y recorriendo cada curva de mi cuerpo hasta terminar perdiéndose bajo mis pies en un entramado subterráneo de tuberías. Hasta ahí es donde espero que arrastre este sentimiento.
Me giro, apoyo los codos en la pared que antes soportaba todo mi peso y lloro. El sonido del agua al caer sobre mi cuerpo extenuado ahoga mis sollozos, pero para mí siguen siendo audibles. Las lágrimas se confunden con las gotitas a modo de perla que han quedado en mi cara y una neblina fina de vapor d agua me envuelve, me abraza. Pero sigo sin sentirme bien. No logro entender por qué me traiciona de ese modo, le he entregado todo y, sin embargo, Él me ha decepcionado. Haría cualquier cosa por Él, lo sabe.
De repente siento un escalofrío que me sacude de pies a cabeza igual que un terremoto.."haría cualquier cosa por ti" esas fueron también sus palabras. Pero ahora...¿Que siento ahora? Algo se ha roto, y para ese algo no sirven las tiritas. Sonrío ante el pensamiento que cruza mi mente, la canción de Alejandro Sanz, tiritas pa' este corazón partió'. No, definitivamente para esto no hay tiritas. Jamás le he pedido nada, tan sol esta vez, y ni siquiera lo ha pensado, su "no" ha sido rotundo. Yo lo habría hecho por Él, no tendría ni que habérmelo pedido, siempre lo elegiria .Pero ahora no esta aquí, conmigo, ha preferido estar en otra parte. No me estoy preparando para Él, para arrodillarme a sus pies, para servirlo... Me estoy preparando para ponerme un pijama y meterme en la cama.
Hoy no habrá espera, no habrá nervios ni cosquilleo en el estómago, hoy simplemente seremos mi soledad y yo. Pero,¿Qué pasará mañana? ¿Seré capaz de entregarme como siempre? ¿Sin sentir esta decepción que hoy me atormenta? ¿Será diferente? ¿Me sentiré lejos de Él? Demasiadas preguntas.
Empiezo a tener calambres en los brazos, no sé el tiempo que llevo así. Abro los ojos, veo mi piel enrojecida, el pelo mojado y pesado pegado a mi espalda, su contacto me asfixia, me incomoda, apago el agua y me envuelvo en una toalla.
No quiero más preguntas por hoy, mañana será otro dia , sí, mañana todo será diferente.
roxanne.
El Muro