Marlene e Inma
Marlene??
Soy Inma la mujer de este degenerado de sumiso tuyo Victor… nos podríamos
ver???
.. Si claro, cuando quieras, pasa algo??? Vente por Palacio, tu marido sabe dónde es…
Gracias
Marlene, me arreglo estamos en un par de horas ahí…..
Vamos
Victor, Tu Diosa y yo hemos de charlar sobre ti de mujer a mujer y qué hacemos
contigo….
Marlene recibió a la pareja guapísima, con unas mallas
negras y su cabello rubio suelto….
Inma se la quedó mirando .. Marlene estás guapísima….
Gracias
Inma. pero dime y pasa a la Sala del Trono.
Ambas mujeres se sentaron con victor desnudo
arrodillado ante ellas.
Ponte
cómoda Inma, Quédate más ligera de ropa,. Hace calor…
Inma se quedó con ropa interior y Marlene se quitó las
mallas, luciendo un minitanga.
Es
por esta cerda maricona, Marlene, no
funciona en la cama… no me da placer…estoy harta..
Bueno
tu y yo podemos también conseguirlo sin su misérrima colaboración… Bésame Inma..
Inma y Marlene se besaron profundamente entrelazando
sus lenguas y sus manos buscaron sus
respectivos sexos acariciándose…
Con
los brazos en cruz cerda.
victor desnudo y arrodillado con los brazos en cruz
contemplaba como Inma y Marlene se besaban y acariciaban…
Inma se tendió en el suelo y Marlene ya sin tanga se
sentó sobre ella de espaldas, depositando su coño en la boca de Inma mientras la masturbaba con sus dedos…
Ambas mujeres estaban empapadas y la primera que se
corrió fue Inma que aunque sofocada por el peso de Marlene y su coño en la boca
aullaba de placer….
Marlene ya tranquila, se enderezó y se preparó a descargar
su orgasmo en la boca de Inma. Los besos y la lengua de Inma la recorrían toda y cada vez más iba en
aumento su tensión de placer….
Me
corro Inma, bebe todo mi orgasmo…..
voy ya…….
Inma en la absoluta oscuridad sentía todo el fluir de
las esencias de Marlene, bebiéndoselas con glotonería..
Cuando acabó de correrse, Marlene se levantó y propinó
dos fuertes bofetones a victor…
Ya
ves que no necesitamos nada de ti, puta cornuda Luego, ambas se sentaron
besándose y acariciándose, con tiernas palabras de amor femenino sin
preocuparse de victor que seguía de rodillas con los brazos en cruz ante ellas
mirándolas con ojos sumisos….