¿Qué sería de mí sin Usted? Quizás anduviera sin rumbo fijo, cual hoja echada al viento. O paseando por calles oscuras en busca de alguien que supiera saciar sus ansias, peligrosa actividad.
Por suerte, un día sin más se cruzó en mi camino el Ser al que le debo la vida y por el cual moriría si así me lo pidiese. Me ha guiado por los oscuros caminos de esto que llaman vivir y crecer. De un simple trozo de fango está haciendo todo un diamante y eso se lo debo a Él, mi Sol, el astro rey que me guía allá dónde voy.