Antes de nada, agradecer a todos los habitantes de Palacio por aceptarme en esta Gran Familia que es el BDSM.
Por eso quiero contaros como me siento ahora mismo.
Desde que perdi a mi sumisa, esposa, compañera, ya no soy el mismo.
Me quede sin ella por mis errores, soy humano y los humanos los cometemos a patadas, pero he aprendido de ellos
y no me volvera a pasar jamas.
Echo de menos su mirada, su sonrisa, la calidez de su cuerpo junto al mio.
Me sentia SOLO en un mundo donde la gente no entiende nuestros sentimientos, nuestra forma de vida y tampoco podemos proclamarlo a los cuatro vientos.
Yo sabia que habia cientos y cientos de miles de personas que como yo, Viven, Respiran y Aman el BDSM,
pero no encontraba nada donde poder expresarme libremente.
Cuando encontre el Palacio me lleve una inmensa alegria y me quite un gran peso de encima.
Por eso, os doy las GRACIAS por estar ahi, sabiendo que nunca mas caminare por este mundo SOLO.
Mis respetos a tod@s los de Palacio.