Ayer cuando leí un texto que vera puso en su blog…. me trajo a la memoria un artículo que escribí hace algunos años y creo puede encajar perfectamente con lo expuesto por ella.
-*BDSM, todo un mundo por descubrir*-
BDSM es la denominación usualmente empleada para designar
una serie de prácticas y aficiones sexuales relacionadas entre sí y vinculadas
a lo que se denomina sexualidad extrema, no convencional o alternativa.
Esta es una de las definiciones que encontrara cualquier
persona que busque estas siglas tanto por Internet como en cualquier otra
fuente de información.
Toda persona de las llamadas medianamente “tolerante” puede
llegar a respetar estas prácticas. Pero hay que estar dentro o vivirlo muy de
cerca para entender el verdadero sentido y significado de las mismas.
Es una cultura diferente, un estilo de vida, un rol que indiferentemente cual sea por el que cada persona se decante, marcan la personalidad del individuo.
Pero a grandes rasgos lo podríamos enfocar como un mundo de amor, deseo, entrega, poder, fuerza, adoración, voluntad, protección, disciplina, arte, superación, dominación, consenso, sumisión, sexo, dolor, placer, seguridad, sensatez, etc… Así podría estar largo y tendido citando adjetivos hasta aburrir, pero no es ese mi cometido en este texto. Mi deseo es contar bajo mi punto de vista y mi humilde experiencia personal, como vivo el mundo del BDSM.
En los años que llevo en esto… he pasado y vivido no sé si
muchas o pocas cosas, eso depende de cómo lo vea cada cual, lo que si puedo
decir es que han sido intensas, muy intensas… Ha habido de todo, bueno, malo,
muy bueno y muy malo. He conocido gente de todo tipo, desde grandes personas
con un corazón inmenso, hasta seres sin escrúpulos, pasando por hipócritas,
déspotas y mediocres. Aquí como en todo, es como reza ese dicho popular…. “En
todos lados cuecen habas”.
Personalmente hoy por hoy estoy aprendiendo a quedarme con
lo mejor da cada momento, intentando ya no digo olvidar porque es imposible, pero
si dejar el pasado atrás y mirar al frente, sin sufrimiento, sin lágrimas, sin
reproches, sin miedo, con paz interior, con tranquilidad, sin prisa pero sin
pausa, sabiendo cual es mi sitio, mi lugar (el que yo libremente he elegido) y
teniendo las ideas muy claras…. Adelante ¡Siempre! Adelante.
En el BDSM nunca se deja de aprender y depende a quien
tengas a tu lado aprendes para bien o para mal.
Tal y como me enseñaron en los primeros pasos de mi andadura...
en una relación D/s el Dom que yo haya elegido como Amo me ha de aportar apoyo,
protección, fuerza, sexo, placer, dolor y mucho mucho amor.
De esa forma traerá la alegría y la felicidad a mi vida,
porque aunque las personas que no están dentro del BDSM no puedan entenderlo,
así es como soy feliz, estando a los pies de mi Amo, entregándole mi voluntad,
mi cuerpo, mi mente, mi corazón y mi alma, siendo esclava de sus deseos,
obedeciendo sumisa sus órdenes, sintiéndome la perra que con avidez hace
realidad sus deseos mas oscuros y a la vez sabiendo que soy su niña, su
princesa, su tesoro, a la cual acaricia, mima y protege como lo que soy…. su
pertenencia mas preciada.
Esta es mi forma de entender el BDSM, así me lo enseñaron,
así lo vivo, así lo disfruto, así soy ¡feliz! y así tal cual…. es como lo
cuento.
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Nota: Por
supuesto ni que decir tiene, que lo escrito en este texto no es el “tratado del
BDSM” ni yo estoy posesión de la verdad absoluta…. Cada cual tiene su visión,
su manera de ver las cosas, para mi todas son respetables (siempre y cuando no
perjudiquen a nadie) y esto no deja de ser mas que mi humilde opinión personal.
Como dije anteriormente…. reflexiones basadas en mis propias experiencias como
sumisa.
