Arrodillada en el suelo, con la mirada baja y la respiración
tranquila. Son estos momentos antes de que se abra la puerta en los que mi
corazón aumenta su latir, en los que mi mente no deja de pensar…y en los que
mis sentimientos empiezan a aflorar con mayor libertad. Sé que Él está detrás
de la puerta, esperando el momento oportuno para atravesarla. ¿Cómo sabe cuándo
ha llegado ese momento? Es un misterio para mí, pero siempre la atraviesa en el
momento justo, ni un minuto antes o después.
A partir de ese instante en el que la puerta se abre, mi
cuerpo reacciona a Él: se tensa, en espera de lo que le hará sentir, se relaja
porque sabe que está en buenas manos. La mente deja de trabajar, sabiendo que
lo Él haga es lo correcto, lo que ambos deseamos y necesitamos.
Toda yo se entrega a Su persona, en mente, cuerpo y alma,
sabiendo que estoy a salvo, sabiendo que sólo Él puede llenar ese vacío que
nadie más puede llenar.
...
...
...
Y una solitaria lágrima recorre mi mejilla cuando abro los ojos y me doy cuenta que todo es un sueño. Un sueño creado por los anhelos de mi alma. Un sueño que llegará a ser realidad en el momento en el que esté preparada...momento en el que Él abrirá la puerta, no antes.
Señorita quien pudiera compartir, esa cruz con usted que tan pesada es, y llena de ternura y amor, se desvanecen tan hermosos sentimientos, al paso de nuevos tropiezos, Yo estoy aquí para ayudarla a levantarse, no tema de mi ,soy duro pero justo, con los mismos dolores y sentimientos, con la misma carga y pesada cruz que usted lleno de sentir, los cuales por cada poro escapan de mi dura piel, deseosa la veo de crecer, deje que sea quien la lleve hasta donde sus pensamientos y sueños anhelan llegar, deje volar su mente junto a la mía y creceremos juntos, uno al lado del otro sin mas palabras, que la de la pasión por lo que sentimos, al entregarnos mutuamente en camino. Es duro pero unidos lograremos que sea al final felicidad mutua.Esas palabras que deseo y anhelo, digas por y para mi : Con mano firme, tiraba de mi correa anclada a mi collar para demostrarme mi sujeción a el...............
Dedicada para tod@s las que sentimos y vivimos en este maravilloso mundo.
Nunca he sido excesivamente aficionada a las redes sociales, pero tras más de un año entre estos muros, se me hace extraño no hacer una pequeña reflexión...
Este tiempo ha modificado mi modo de pensar en infinidad de pequeñas cuestiones, aunque también he mantenido muchas de mis ideas intactas. Hoy puedo decir que tengo muy claro lo que quiero, aún siendo consciente de que este es un sendero misterioso y desconocido, donde una nunca deja de sorprenderse, ni sabe exactamente hasta donde llegará. Pero tengo la tranquilidad de sentirme orgullosa, sí, orgullosa de haber sido siempre sincera, de haber ido paso a paso y sin prisas, de haber sido exigente conmigo misma y con los demás, de no haber olvidado en ningún momento la persona que siempre he sido...
Y también afortunada. Afortunada de descubrir mi capacidad de percibir tanto a través de otra persona, de creer transformarme en un simple pedacito de barro esperando adquirir su forma, de disfrutar de las lágrimas del esfuerzo, de temblar de incontrolable excitación, de apreciar la dura caricia del dolor, de ver con el alma en vez de los ojos, de emocionarme de un modo indescriptible, del placer de desprenderme de todo egoísmo, de flotar en un climax mental infinito, de la imperiosa necesidad de darme toda entera... En definitiva, de sentir a un nivel tan superior que puede que a veces abrume o desconcierte... pero a fin de cuentas (y manteniendo siempre los pies en el suelo), es un privilegio que forma parte de mi ser.
Estos meses no han sido siempre un camino fácil, es cierto... Posiblemente haya vertido lágrimas innecesarias, y me he saturado con mil y una reflexiones, pero también he sentido una plenitud que no conocía. Y he descubierto y comprendido cosas de mi misma que nunca habría imaginado, o quizás, quien sabe, que simplemente no me atrevía a reconocer. Motivo por el que tengo la certeza de que seguiré mi andar, sin prisa pero sin pausa, aprendiendo y creciendo, atenta sobre manera a esas personas que hablan desde la experiencia. Que poseen la sabiduría que yo aún no tengo, y que aunque duela, suelen acertar de pleno en su dictámenes. Aunque también a esas personas que empiezan, que aún perdidas, en muchas ocasiones te ayudan a ver las cosas desde otro prisma, mostrando la vulnerabilidad que todos podemos llegar tener, y recordando la importancia dejarnos envenenar, obsesionarnos, o desviarnos del camino que deseamos seguir.
Tengo muy claro lo que soy... sí, soy sumisa, pero solo para quien yo le concedo ese poder, para quien lo despierta, para quien lo gana, para quien me llena, para quien sabe romper mi coraza y hacer aflorar esa necesidad de entrega, para quien alimente mi deseo de mejorar, de complacerle a toda costa, de avanzar en mi sumisión, para quien me hace reflexionar y sabe tocar mi mente de sumisa sin olvidar la persona que la alberga. Porque ante todo soy mujer, y eso siempre irá por delante... Mujer que nunca dejará que la sumisa se pierda, que en el fondo no sabe dejar de intentar razonar lo irrazonable... Pero también mujer que lucha para que esa sumisa descubra todo lo que puede llegar a ser, todo lo que puede superar, todo lo que puede llegar a dar, y la indescriptible plenitud que sienta al hacerlo. Esa sumisa que siente, con la mente, con el alma y con cada poro de su piel. Pero que solo acepta un Dueño que sea Hombre antes que Dominante, porque ni estoy perdida, ni desesperada, ni necesito una tabla de salvación.
Y es que... esa jessika que entró aquí hace ya 13 meses... oculta bajo su caparazón, desconfiada y esquiva... Pensaba, recelosa, que solo entraba a aprender, y que no compartiría ni sentimientos, ni temores, ni vivencias... con nadie. Y sí, he aprendido, he aprendido sobre todo que aún me queda mucho por aprender, mucho más de lo que en un principio pensaba. Pero curiosamente, la gran mayoría lo he aprendido, de esas personas. Esas que he conocido aquí, que algunas he tenido la oportunidad de tocar, besar y abrazar. Esas que han pasado a formar parte de mi vida, y que espero que en cierta medida siempre sigan ahí. Esas que hoy quiero decirles desde el cariño... Gracias.
¿Por qué el tono de sus breves palabras aquí han sido muy diferentes al tono de sus palabras allí? ¿Qué necesitaba demostrarme o demostrarse?
Se lo pregunto, porque pienso que también me parece interesante conocer sus contradicciones y debilidades; ya que conociendo las suyas aprendo de las mías.
Siempre hablamos de sus debilidades, las de las sumisas, pero nunca de las nuestras. No es necesario que me responda. ¿Para qué? Le basta con mirar a los ojos, ahí encontrará las respuestas a todo. También a los suyos, ahí encontrará sus carencias. Las que sólo usted conoce y guarda con recelo y miedo a ser descubiertas.
Me he dado cuenta que usted dice y opina de forma diferente en función de donde está, en función de con quien habla, en función de lo que usted quiere en ese momento, en función de lo que la otra persona quiere o necesita escuchar. Pero en ninguno de esos casos es usted.
Eso impide que se le pueda llegar a conocer. No lo permite, no se lo permite. Le es más sencillo vender caras distintas. ¿Eso es ser fuerte o simplemente aparentarlo?
Imagino que nadie nace como vendedor de rostros. Imagino que sus cicatrices son profundas. imagino que hubo una mujer o varias a las que usted no dominó y, sin embargo, amó. Suele ser siempre así. ¿Imagino bien?
No tema, yo también he llorado.
Eso es lo único que le ayudará a ser fuerte, tanto, que sólo de ese modo podrá desprenderse de las mil caras.
¿Quien inventó los miedos y los complejos? si lo conociera le diria cuatro cosas bien dichas.
La desconfianza en si mismo, la inseguridad, el verse gordo o demasiado flaco... son unos cuantos ejemplos de sensaciones nada agradables... y por desgracia las vivimos todas en alguna etapa de nuestra vida.
Pueden ser temporales si alguien te enseña a corregirlo a tiempo, pero se pueden convertir en una "enfermedad" grave y permanente si no se tiene a nadie detras que sepa ayudar y guiar.
¿Cómo vencerlos? nadie tiene la respuesta mágica que haga que aquello desaparezca para siempre, pero en lo que muchos coinciden es que el secreto esta en quererse a uno mismo, ese es el punto principal de partida para aniquilar todo lo demás.
Pero ¿cómo se le hace ver eso a alguien, cómo se consigue que lo entienda y sea capaz de asimilarlo y con ello, consiga dar un cambio de rumbo?
Que alguien me lo diga, ¡por favor!.
Podrán ser curvas casi rectas.
Podrán ser curvas suaves.
Podrán ser irregulares, con pendientes incluidas.
Podrán ser curvas peligrosas, explosivas.
Podrán ser curvas muy profundas.
Pero siempre serán curvas y debes estar orgullosa de ellas.
Sácate partido: arréglate, ponte guapa, maquillate, vístete seductora y elegante.
Mírate al espejo y dime ¿qué ves?.
Eres una mujer hermosa, con una piel de seda que hipnotiza hasta al más casto e inocente de los hombres.
Quizá tu no lo veas, pero con tus curvas te llevas de calle a cualquiera que se atreva a mirarte.
No debes avergonzarte jamás de tu hermoso cuerpo, pues tu Señor lo amará y cuidará como su Templo.
Sonríe, guiñate un ojo cada mañana y disfruta de tu feminidad.
¡No te escondas!