Ha sido un honor estar a Sus pies y de Su mano.
Gracias por tantas cosas especiales, bonitas, complicadas, excitantes, dolorosas, placenteras.
Le agradezco profundamente este año tan perfecto. Por ser en todo momento el Maravilloso Amo que cualquier sumisa desearía en su vida. Un Caballero y un Señor con todas las letras.
Fuimos uno. Absolutamente completos. Me llevó a una trascendencia y plenitud inimaginables.
No concibo mi camino sin Usted. Pero la vida, cruel e intolerante, a veces exige tomar caminos opuestos, quizá rasgados, por muy fuerte que sea esa unión. Podrían volver a unirse. Sin embargo, eso sólo el destino lo sabe.
Buena suerte, Señor Baalberith en Su nueva etapa.
Le deseo toda la felicidad de este Mundo.
Mis respetos, cariño y enorme gratitud hacia Usted.
brunia.
El Muro